Cuentan los que la oyeron que en las noches oscuras, cuando ya casi todos se habían ido a la cama y se guarecían en sus hogares, aparecía la llorona...
Sus gemidos eran lastimeros, su llanto desgarrador su forma desconcertante, que hasta al más valiente se le ponía el pellejo de gallina...
Que la escuchó alguien por aquí, que la oyó alguien por allá... sin embargo nadie la pudo ver...
Me decía un babosito- esa si que llora feyo... cuando la oyí se me pararon hasta los pelos... sentí que se miba el alma, así que salí corriendito pa la casa...
Y cómo sabés que era la llorona?
Si viera que horrible le hacía...
Y por donde la oiste?
Allí por el valle del centro...
Pero y nadie la vio?
Quizás nadie...
Vos no has oido nada quizás
Claro que sí...
Otros decían - cual llorona, que me la manden y yo si la voy a hacer llorar...
Y otros, los más incrédulos - son mentiras a alguien le ha dado por andar asustando gente...
Versiones parecidas contaban los vecinos, lo único que nadie podía asegurar que era...
Así que si vas de paseo, y te toma la noche... ten mucho cuidado no andes por las calles oscuras pues al rato menos pensado te puede salir la llorona
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